Unos dirán que con sobrados motivos y otros que cuando el río suena agua lleva, el caso es que parece evidente que estamos instalados en una importante crisis de liderazgo. Aun pecando de reiterativo por el argumento, la reciente crisis económica y la forma en la que se está gestionando desde aquellos que ostentan el poder y que han de liderar la evolución de nuestra sociedad, ha puesto al descubierto el enorme descrédito y desconfianza que tenemos en nuestros líderes.
Por otro lado, y aunque pueda parecer que no tiene nada que ver (yo creo que sí –como se verá- ), el auge que en los últimos tiempos está teniendo la Psicología Positiva como marco desde el que abordar los fenómenos psicológicos que podemos denominar como “normales”, nos acercan de forma importante a una visión del liderazgo de marcado carácter humanista.
Características del líder auténtico
Los trabajos pioneros de Avolio establecieron un nuevo modelo denominado Liderazgo Auténtico. Los líderes auténticos son personas capaces de mostrar una línea de comportamiento regida en gran medida por cuatro principios básicos:
- Transparencia en las relaciones. Los líderes auténticos son personas que se abren a los demás y que se muestran tal como son. Sin miedos. Sin temor a los juicios y a las valoraciones. Más bien al contrario, tratando de encajarlos, valorarlos y obtener lo constructivo que en ellos pueda existir. Sin duda este hecho genera un buen clima de confianza en sus colaboradores que hace que estén dispuestos a compartir también sus pensamientos y emociones.
- Conciencia de sí mismo. Los líderes auténticos tienen un alto conocimiento de sus fortalezas y debilidades. Esto les permite potenciar sus cualidades positivas y diagnosticar velozmente las áreas en las que su comportamiento puede no ser eficaz. Cuando estas personas son conscientes de ello pueden transmitir con claridad y sin temor hasta dónde pueden llegar, qué pueden aportar, y en qué áreas necesitarán ayuda.
- Procesamiento equilibrado. Los líderes auténticos son capaces de examinar de forma objetiva y precisa la información que es relevante para tomar una determinada decisión. Para ello no dudan en recabar información de otros –aunque sepan que puede ser contraria a la suya – con el objetivo de tener una visión lo más amplia y variada posible sobre un problema específico.
- Moral Internalizada. Los líderes auténticos muestran una fuerte auto-regulación de sus comportamientos con base en sus propios valores y principios. Son capaces, en este sentido, de hacer frente a las presiones sociales, jerárquicas, organizacionales, y mantener una línea coherente de conducta soportada en un conjunto de principios y valores personales. El resultado de ello es la coherencia y consistencia de sus acciones.
En definitiva los líderes auténticos se conocen bien a sí mismos, favorecen la transparencia en las relaciones, muestran un eficaz procesamiento de la información para la toma de decisiones y mantienen una línea de comportamiento coherente con un conjunto de valores y principios personales.
A muchos profesionales y académicos este planteamiento del liderazgo nos ha parecido de gran valor por lo que de visión humanista tiene. Pero también nos hemos realizado la pregunta fundamental… ¿funciona? Pues sí, el liderazgo auténtico funciona.
Los estudios realizados hasta la fecha han mostrado que los líderes auténticos son capaces de aumentar la motivación de sus colaboradores, su compromiso y su satisfacción. Cuando se ha estudiado el liderazgo auténtico en empresarios emprendedores se ha descubierto cómo los líderes auténticos eran capaces de influir en las actitudes y el bienestar de sus empleados y, a través de ello, mejorar el rendimiento de la nueva empresa.
Así pues los empleados que perciben a sus líderes como líderes auténticos tienen niveles más altos de compromiso organizacional, satisfacción y felicidad en el trabajo. En este punto, la gestión por valores también ayuda en esa mejora del compromiso de los empleados con la misión de sus líderes y por extensión de las organizaciones.
muy oportuno el post, ahora que tanto se está hablando de las claves de un líder como Steve Jobs.
Gracias Ana por el comentario.
Es verdad. El post está escrito justo antes de su fallecimiento !!! Y sin duda la imagen que de él está apareciendo en los medios es la de un líder auténtico. A mí me gusta especialmente el valor que transmite y con el que era coherente de: «fiate de tí, de lo que sientes, de lo que quieres».
Vaya que si funciona …! Muy acertado tu Post, David. A ver si se contagian más líderes ‘to be’.
Me ha encantado leer tu artículo. Creo en lo que espones. Estoy convencido que en las organizaciones, el nivel de éxito. de excelencia y su futuro, dependen directamente del nivel de liderazgo de sus integrantes y considero que las empresas que mantienen a dirigentes que no participan del liderazgo que propones un lujo que ninguna empresa puede permitirse.
Gracias por el artículo, me parece muy interesante y lo voy a difundir.
Saludos
José Miguel, gracias por el comentario. La verdad es que mirando a mi alrededor encuentro personas que participan de de un estilo «auténtico». No necesariamente siendo líderes con autoridad formal, sino más bien dejando su enorme impronta en su área de responsabilidad con coherencia personal, sentido de uno mismo y fieles a sus intuiciones.
Antonio Pablo, gracias por tu entrada. Estoy completamente de acuerdo con tu comentario. Creo, además, que una de las tareas fundamentales que tenemos en las organizaciones es la de tomarnos en serio esta cuestión y «buscar» activamente estas personas para embarcarlas, persuadirlas y comprometerlas con un proyecto de organización en el que son muy importantes.
Me gusta que entre las cuatro principios básicos figure el «procesamiento equilibrado», como una manera objetiva y realista de analizar lo que ocurre y extraer conclusiones, frente al «positivismo optimista» que parece imperar estos días…
Personalmente creo que motiva más la realidad justificada y entendida que el optimismo porque sí.
Buen post David y me alegra que no aparezca la palabra optimismo por ninguna parte :)!!
Gracias Bea Lucía !!! En mi opinión creo que con el cocepto de optimismo sucede (al igual que con otros muchos conceptos-ideas-etiquetas fuerza) que ha sido utilizado como una forma bastante simplista de explicar algunos fenómenos (habitualmente relacionados con el éxito). Sin embargo como tú dices un análisis más profundo del concepto y sus relaciones nos puede hacer ver cómo en algunos contextos el optimismo por sí solo puede constituirse en una limitación más que en un beneficio. A pesar de ello el concepto de optimismo tiene una importante actualidad y existen estudios serios que lo ponen en relación, por ejemlo, con el éxito de los emprendedores. Aún así pones la zanahoria para escribir un post sobre optimismo ….
Buen post David, gracias por ilusionarnos con un liderazgo verdadero que nos haga olvidar el concepto de liderazgo autoritario, por otro lado cada vez más pasado de moda, afortunadamente . Me quedo con la conciencia de uno mismo, como requisito para ejercer un auténtico liderazgo. ¿Cómo va a resultar creíble un líder que no es capaz de reconocer sus limitaciones y su disponibilidad a aprender de otros?…
Virginia, muchas gracias por tu comentario. Me gusta mucho tu contraposición con el liderazgo autoritario que tantas veces nos hemos encontrado en las organizaciones. Estoy convencido de que, la verdad, el tema este del liderazgo auténtico va mucho más allá de su relación con la competitividad de las organizaciones. Al hablar de ilusión, de reconocer limitaciones, de disposición para aprender de otros …., me haces pensar en que la autenticidad es en cierto modo una forma de acercarnos a una sociedad más saludable: en lugar de dejarnos llevar es mirar hacia dentro y decidir qué es importante para nosotros y … actuar en conecuencia.
[…] cualidad clave para un líder del siglo XXI. En una era de conectividad y transparencia perpetuas, los líderes que son auténticos y sinceros en sus tratos generan confianza y establecen una atmósfera de apertura y […]